Tu producto debe ser bueno 

Lo primero que debemos hacer cuando nuestro producto no se vende en el mercado es analizarlo. ¿Es realmente bueno? O, por el contrario, ¿es solamente una impresión nuestra? Es duro, si. Pero, aunque en muchas ocasiones nos resulte difícil de afrontar… La realidad es que no vendemos nuestro producto porque no es realmente bueno.

Vale, ahora nos puede venir otra pregunta y es.. ¿Depende del tipo de negocio? la respuesta es clara: No. Si tu producto es malo, sea cual sea tu mercado… ¡No vas a vender nada! Seas el tipo de profesional que seas, hay tres factores clave a tener en cuanta para poder destacar en un mercado actual tan competitivo:

👍 Tener un producto bueno.

👍 Establecer una estrategia de Marketing, publicidad y promoción adaptada a ese producto.

👍 Revisar y comprobar que ambas, se cumplen.

A continuación os mostramos algunas de las razones de porque no vendes tu producto.

  1. Damos por sentado que nuestro producto es bueno.
  2. Damos por sentado que nuestro producto es necesario.
  3. Damos por sentado que los likes son reconocimiento.

Antes de saber si nuestro producto es bueno, debemos analizarlo no desde nuestro punto de vista, si no la del cliente. Además, debemos de pararnos a pensar si nuestro producto cubre una necesidad de mercado, o por el contrario, es uno más. Esto es crucial para establecer una estrategia. ¡Pregunta, pregunta y no te cortes! Por último, por razones como presión grupal o deseabilidad razones de porque no vendes tu productosocial, damos like y proporcionamos feedback positivo con bastante facilidad. Esto, no es bueno. Ya que regalamos reconocimiento, y esos likes no se traducen en ventas.

¿Como arreglarlo?

¡Ten siempre un plan B! Desarrollar un plan estratégico de reajuste es la opción más complicada, pero a la vez, la más efectiva cuando el plan A, no funciona. Algunas de las opciones que puedes emplear son:

  • Centrar fuerzas y energías en volver a definir tu producto.
  • Indagar sobre los problemas que resuelve eso que sabes hacer.
  • No vender lo que no sabes, lo que no conoces.
  • Mejorar la calidad de tu producto a través de la acción.
  • No dudar sobre tu producto cuando lo comunicas, pero si escucha las necesidades de tus clientes y a la experiencia que quieren vivir cuando se relacionan con tu producto.

Por último, si ves que este es tu caso. Frena en seco, que no te de miedo. Más vale ahora, antes de que sea demasiado tarde. Vender un producto «mediocre» hará que tu marca se devalué y cuando quieras arreglarlo ya no habrá vuelta atrás. Además, cuando un consumidor o cliente potencial haga un comentario negativo acerca de tu producto… ¡No hagas oídos sordos! escucha todas y cada una de las críticas, sólo así podrás saber como de bueno es realmente tu producto.

Si necesitas ayuda profesional o establecer una nueva estrategia, ¡no dude en ponerse en contacto con nuestro súper equipo!